Al corriente: mayo 2015
El Grupo Squibb se ha convertido en líder mundial en los sectores de demolición y desmantelamiento. Con una gran flota de vehículos con un valor de aproximadamente 90.000 GBP cada uno, el director de transporte Danny Nolan debía hallar el modo de proteger su inversión. Estas son sus palabras: “Debido a los precios ridículamente elevados de las primas de seguros, era necesario encontrar un modo de reducir las reclamaciones por accidentes”. Squibb instaló la grabadora digital móvil, de Brigade, en el vehículo de su conductor más precavido, que nunca había tenido un accidente (por su culpa o la de otros). La empresa supuso que se grabarían pocos incidentes. Sin embargo, por primera vez en su carrera laboral con Squibb, el conductor tuvo una colisión. Insistió en que no había sido culpa suya, pero no estaba seguro de cómo había ocurrido el accidente.
“Vi que un coche entró en la rotonda. El coche estaba en el carril exterior y quería salir de la rotonda, mientras que yo estaba en el carril de en medio para seguir recto. Oí un ruido en el lateral. Todo ocurrió muy rápido. Salí del vehículo y la conductora me preguntó qué había ocurrido. Le expliqué que había chocado conmigo, pero ella discrepó. Le respondí que en realidad no importaba porque las cámaras del vehículo habían grabado todo el accidente. Me parece que no me creyó”.
Se daño un escalón del camión, y el coche sufrió daños importantes en la puerta frontal y la parte posterior. En la oficina central se revisó la grabación y se vio claramente que la culpa fue de la conductora. Danny Nolan manifestó: “Nos alienta saber que las grabaciones digitales móviles de Brigade nos protegen. Envié la grabación directamente a nuestro seguro. Normalmente este tipo de accidente, incluso con un testigo, terminaría siendo con suerte un caso de compensación mutua, lo que costaría un total de 5.000 GBP, sin tener en cuenta los costes legales. La grabadora digital móvil ya se ha amortizado”.